Aunque es el modelo más básico de la línea Forerunner, tiene todas las prestaciones necesarias para mejorar en la carrera a pie.
Luego que capta la señal de satélite la primera vez (tarda unos 10min), las siguientes veces en tan solo segundos. Lógicamente necesita estar al descubierto, pues la antena no es tan potente como para conectarse bajo techo.
Una vez conectado apenas se dan unos pocos pasos ya te marca el ritmo y la distancia, ciertamente con bastante precisión. Se puede configurar el idioma, las unidades de medida, perfil (ritmo de sprint, carrera, caminata), activar la alarma para cuando bajas o sobrepasas el ritmo (min/km) programado y construir planes de entrenamiento dependiendo de lo que quieras hacer: fondo, intervalos, velocidad, etc.
Es una adquisición que recomiendo a todo aquel que quiera mejorar su desempeño tanto en el running como el el cliclismo (soporta ambas disciplinas). Si se dispone de los recursos pueden optar por el 201 que trae pilas recargables (como las de celular y no AAA como el 101), y la posibilidad de conectarlo a la computadora para descargar los entrenamientos. Otros modelos como 205, 305 ó 405 son más estéticos y se confunden con un reloj normal, además que también cumplen la función de monitor cardíaco, pero allí si estariamos hablando de unos 400$ de costo.
Por lo pronto mi modesto GPS de entrenamiento me ha ayudado a conocer mejor mis ritmos, a deprimirme con mi ritmo en cuestas que es paso de morrocoy, a controlar las distancias, y en definitiva a esforzarme más cada vez que en la pantalla me aparece el mensaje de acelere!.
Garmin Forerunner 205
Garmin Forerunner 305

Garmin Forerunner 405 para hombre y mujer respectivamente.
En este modelos la novedad radica en su pantalla táctil.
Para mayor información en Garmin.com